La idea original no es mía, la ví en Pinterest, no recuerdo en qué tablero, pero era fácil y divertido así que empecé a guardar corchos...
Y a pensar en qué plantitas crasas tenia en casa de las que pudiera sacar algún brote, algunas me las dio mi hermana Bel, que siempre colabora conmigo en todo
Algunas son del campo, de las orillas del río Manzanares, como éstas que son durísimas y hasta florecen...
Y en un ratito de una mañana de vacaciones horadé los corchos con un cuchillo de sierra pequeño y me dispuse a plantar esta monada
Era como un juego, nunca me había fijado en los dibujos de los corchos, algunos son preciosos, como estas casitas, no valen los de silicona, tienen que ser de los de toda la vida.
Los he montado sobre un tablero de corcho pequeñito, cada uno lleva dos alfileres, al ser finito el alfiler traspasa el corcho sin problemas y se quedan bien sujetos porque no pesan.
A mi me gusta el resultado, me parece divertido,
¿Como regarlos? Pues con un frasco de tinte, bien lavado y reciclado para la ocasión, sólo necesitan un par de gotas de agua al día.
Lo mejor de todo, el coste, CERO EUROS, todo reciclado!!!
Besos
